sábado, 15 de marzo de 2014

Disciplina positiva, escucha activa y acompañamiento emocional.

Me gustaría compartir con vosotros/as   un cambio que se  ha producido en mi vida familiar. Seguramente algunos se sentirán identificados con lo que escribo a continuación y otros pensarán que son pamplinas.         
A raíz  de acudir a grupos de crianza y  de formarme en pedagogías alternativas. Empecé a escuchar conceptos nuevos, que no había oído nunca ni en mis 5 años de universidad, ni en los tantos que llevaba trabajando en centros educativos. 
Disciplina positiva, acompañamiento emocional, acompañar el llanto del bebé, escucha activa, crianza respetuosa…
Por disciplina positiva se entiende la doctrina o la enseñanza que ayuda a entender la conducta inadecuada de los niños, promueve actitudes positivas hacia los niños y les enseña a tener buena conducta, responsabilidad y destrezas interpersonales por medio del uso de los principios de generosidad, estímulo y respeto mutuo.
Todo me sonaba a chino, empecé a leer libros que me recomendaban, cuando comienzas a leer sobre un tema que es radicalmente diferente a lo que uno ha vivido y estudiado, al principio estas un poco escéptica,  piensas “como se les va la pinza” … pero según vas leyendo, hablando con otros padres y profesionales y observas como hablan y tratan a sus hijos. Entonces esos bloqueos empiezan a romperse y poco a poco se van modificando los esquemas e ideas. Es un proceso, como todo, del que no se termina nunca de cambiar y aprender.
Mi fuente más poderosa de aprendizaje es la observación de otras mamás, que manejan esta forma de comunicarse de una manera tan natural con sus hijos. Luego evidentemente hay libros muy buenos que me han ayudado mucho a entender y a cómo actuar.
Pero aunque en el plano teórico he cambiado mucho, en el práctico, me resulta mucho más difícil. ¿No sé si os pasa igual?
Voy a poner varios  ejemplos para que se entienda: en un momento de estrés, con las prisas de salir al cole y a trabajar, con la hora justa,  ahí,  es cuando se me olvida todo, yo , sola con los tres peques , las prisas…y acabo recurriendo a lo de siempre… gritos. Es después, cuando llega la calma, cuando pienso, tendría que haber hecho esto o esto y me siento fatal.
O cuando mi hija me monta una pataleta, de repente, sin haberme dado cuenta. Se que ahí es donde tengo que  reconocer sus sentimentos, favorecer una escucha activa… y a veces lo hago, y me ha funcionado, pero no siempre. Porque me dejo llevar por el estrés del momento, el cansancio, no recuerdo bien como era las formulas que había que utilizar  ( para mi son elemento de estudio porque reconozco que me comunico fatal).
Así que he decidido tomar algunas medidas que me faciliten que poco a poco, porque claro, Roma no se construyo en un día, ir cambiando pautas en la comunicación familiar.
Yo tengo un libro de cabecera, es el más práctico y el que me resulta más útil, seguro que lo conocéis, “ Aprende a hablar a tus hijos para que  te escuchen , y aprende a escuchar a tus hijos para que te hablen”.
Me he hecho una especie de chuleta con los puntos y estrategias que hay que hacer en cada situación. En vez de intentar llevar todo a la vez, porque no da resultado. Voy a ir poco a poco, cuando consiga automatizar unas, pasaré a otras.
Me pegaré el esquemita  en varios sitios de la casa, así cuando pase por ahí lo leeré, lo recordaré e intentaré ponerlo en práctica en el día a día. Sólo centrándome en eso, lo hice con el primer esquema y el resultado fue muy bueno,  he continuado con el segundo.
1º esquema: Reconocer los sentimientos a través de la escucha activa.
1.     Identificar los sentimientos del niño y verbalizarlos.  Ej; Pareces muy desilusionado, te veo enfadado…. ¿Me lo quieres contar?
2.     Reconocer los sentimientos con palabras. Ej:¡ oh!, ya veo, ajá…
3.     Conceder al niño sus deseos en la fantasía; Ej: sería increíble tener un lápiz mágico  que no cometiese faltas, ¿verdad?
4.     Aceptar los sentimientos sin dejar de censurar el mal comportamientoEj: Estas tan  enfadado por lo que ha pasado que no paras de dar patadas a los muebles, eso no lo puedes hacer, si quieres puedes dar patadas a la pelota en el jardín.

2. Esquema: Propiciar la colaboración
1.      Describe el problema ej: hay manchas de pintura por todo el suelo de la habitación.
2.     Da información ej: la pintura se limpia mejor si está húmeda, cuando se seca cuesta mucho más esfuerzo y tiempo quitarla.
3.     Da opciones para  que escoja ej: Lo puedes limpiar con un paño mojado o con una esponja, ¿cómo lo vas a hacer?
4.     Expresa suscitamente ej:¡pintura!
5.      Expresa sus sentimientos ej: No me gusta ver el suelo manchado.
De esta manera, como todo lo imitan, aprenderán a respetar la opinión de los otros, sin enfadarse . Mis hijos muchos de sus conflictos y peleas es porque no aceptan que el otro quiera hacer otra cosa. Desde que he comenzado a modificar mi forma de comunicarme, el nivel de crispación  ha bajado muchísimo. Evito muchas rabietas y colaboran más (lo que tradicionalmente se entiende por obediencia). Todo es mucho más relajado y fácil, a medida que más utilizo las formulas de escucha, me resulta más sencillo ir incorporándolas a mi vida diaria.
Para mí el cambio ha sido muy positivo, ¿cual es vuestra experiencia en vuestro hogar? ¿ Conocéis esta forma de educar? ¿ qué resultados os da?





5 comentarios:

  1. Muy interesante el tema Eva! La verdad no puedo decir mucho, porque me gustaría ponerlo en práctica, pero me pasa como a ti, a veces las prisas y algunas situaciones me desbordan y no actuo bien yo....pero no creo que sean pamplinas lo de la inteligencia emocional, ni la disciplina positiva, sabes si hay cursos o algun tipo de formación para padres? Me vendría fenomenal porque a mi hija Sabrina le cuesta bastante aceptar que no todo puede ser como ella quiere, es muy mandona, un poco de mal genio, la tolerancia a la frustración, saber esperar y respetar al hermanito....sigo trabajando en ello, pero a veces siento que me faltan herramientas, en vez de repetir siempre lo mismo...Gracias x informarnos y hacernos reflexionar! Paula

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  2. Me ha encantadooo!! Y con tu permiso me lo copiaré y como tu me lo colgaré por toda la casa! Jeje. La teorica es muy facil cuando estas serena, pero cuando los nervios están a flor de piel olvidas muchas cosas que en el fondo sabes. Yo tambien he cambiado mucho el paradigma de la educación desde que soy madre (y sobre todo madre blogera).
    Un besazo

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  3. A mi también me ha gustado mucho esta entrada. Yo también estoy trabajando en ello. Y todo consejo es bienvenido. Muchas veces, por el trabajo, cansancio, etc. me cuesta mucho mantener la calma. Pero después viene la peque (tiene 32 meses), se abraza a mi pierna y me dice: te quiero mucho mami. Y se me olvida todo el estrés :-)

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  4. Muchas gracias por compartirlo. Me pasa lo que a ti, en la teoría lo tengo clarísimo, me falla la práctica. Tengo ese libro, mañana mismo lo cojo y me pongo con ello. Me gusta tu planteamiento.

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  5. Gracias a todas por vuestros comentarios, veo que somos muchas en la misma linea. Un besote

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